Existen habitantes que se mudan a partes de nuestro cuerpo sin nuestro consentimiento, pero que suelen ser muy peligrosos si no actuamos rápidamente.
Los piojos son parásitos que habitan en el cuero cabelludo y que aprovechan los surcos o grietas que existen para poder alimentarse; estos parásitos tienen espinas en las patas con las que se aferran, el recorrido que hacen por la cabeza produce una picazón extremadamente fuerte.
Los piojos producen una infestación muy común por la forma que se reproducen llegando al punto de albergar cientos de huevos llamados “liendres”. Debemos tener en cuenta que estos habitantes aparecen con más frecuencia en los niños.
Existen tres tipos de piojos:
• El Piojo que se aloja en la cabeza. (Pediculus- capitus)
• El Piojo que se aloja en el cuerpo (Pediculus humanus humanus)
• El Piojo del Pubis o Ladilla (Pthirus- pubis); este último se alberga en los pelos de los genitales.
• Saber que estos piojos también se albergan en las cejas, pestañas y cuerpo.
¿Cómo prevenir?
• No utilizar cualquier objeto, que vaya sobre la cabeza, que haya sido de otras personas.
• No prestarse audífonos
• Tener un peine personal
• Cambiar lo más seguido posible las fundas de la cama y almohadas.
• Un consejo casero es echar un poco de aceite de oliva sobre el peine llamado “patrullero” para así hacer que el pelo lubrique y poder expulsar las liendres y piojos.
• Utilizar shampoo para combatir piojos, no exagerar la dosis que se ha indicado.
No olvidar que la mejor manera para que estos parásitos desaparezcan es la limpieza diaria del cuero cabelludo (lavado del cabello) y practicar hábitos de prevención.
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